Ya en la antigua Grecia estas bellas flores estaban relacionadas con la diosa Iris, y simbolizaban la unión entre cielo y la tierra, justo como lo hace un arco iris.
La planta de iris comúnmente conocida como lirio es una planta de la familia Iridaceae. Son originarios de distintos lugares del planeta. Crece en diversos ecosistemas. La altitud no es un factor condicionante en su producción. Se puede cultivar Iris en regiones frías, de montaña o incluso desérticas. Europa, Oriente Medio, África del Norte y Norte América son algunos de los lugares donde más abundan estas especies de flor. Existen más de 200 especies de Iris. Cuenta con hojas largas en forma de cinta que pueden medir unos 40 cm. Estas hojas se presentan erguidas y son verdes en tonos claros.
Algunas flores del lirio ofrecen perfume y también tienen un gran tamaño. Pueden ser de distintos colores: amarillos, blancos, azules, rojos, etc. y también con flores jaspeadas, es una planta muy hermosa y rustica a la vez para tenerla en nuestros jardines.
Existen distintos tipos de iris, unos de rizoma y otros de bulbo. Los iris de bulbo se plantan a comienzos de otoño y florecen en primavera. Dentro de este grupo tendríamos por ejemplo a los Iris hollandica. Este Iris puede vivir en nuestro jardín durante muchos años, cada primavera resurge del suelo y florece, completa el ciclo y desaparece la parte aérea durante el verano hasta la primavera siguiente.
Otros por el contrario, los de rizoma, son de hojas perennes y estos en nuestro jardín permanecen permanentemente en tierra. Dentro de este grupo tendríamos al Iris japonica y al Iris germanica. A estos Iris les gusta una tierra de jardín normal, eso si, que este bien drenada. De lo contrario puede producirse problemas de pudrición de los rizomas. Crecen muy bien en exposiciones soleadas, e incluso algunos llegan a florecer en semisombra.
Y otro grupo de iris con rizoma, sería el de los acuáticos. Estos viven en los margenes de los estanques o ríos. Iris psedoacorus e Iris laeviegata serían dos de las especies que disfrutamos en nuestro jardín. Son de hoja perenne, en invierno se paraliza el crecimiento, pero luego en primavera crecen y florecen.