La Capuchina (Tropaeolum majus) es un planta anual herbácea de la familia Tropaeolaceae y origen en Ecuador, Perú y Colombia.
Alcanza una altura de unos 25 cm. El porte es rastrero pudiendo llegar a trepar.
Las hojas son simples, alternas, pecioladas, peltadas, con el limbo redondeado y lóbulos de poco a muy marcados y profundos. El peciolo lo tiene insertado en posición más o menos central, con nerviación radial. El color es verde claro. Aunque también existen variedades que tienen las hojas matizadas.
Las flores son grandes, pedunculadas, solitarias, con el cáliz prolongado en un espolón y corola de cinco pétalos libres. El color de lo pétalos varía del amarillo al naranja, a veces con manchas de distinto color en su parte basal. En el jardín nos florece en primavera.
En jardinería se usa por la vistosidad de las flores, para cubrir parterres y compartir con otras plantas en macizos. Se cultiva como anual pudiendo vivir varios años en condiciones suaves. Es una planta rústica, soportando suelos pobres. Requiere exposición soleada y un suelo relativamente húmedo.
Su reproducción se hace por semillas y se naturaliza muy bien. En el jardín ya no hay que plantarla, dejamos que eche semillas y ella sola nace todos los años.
En algunos lugares se ha convertido en invasiva escapando de los jardines.
Sus flores y hojas contienen principios activos medicinales. También se usa como repelente contra pulgón en jardines, tanto por su presencia como mediante infusión y/o maceración.